El Ejército de Israel realizó este lunes nuevos bombardeos contra “objetivos” del partido-milicia chií Hezbolá en el sur de Líbano, incluidos “edificios militares” del grupo, en medio del repunte de los combates en la frontera y ante el temor de una expansión del conflicto en Oriente Próximo.
“Aviones de combate han atacado durante la noche (del lunes) objetivos de Hezbolá en el sur de Líbano, incluidos edificios militares en la localidad de Kafarkila e infraestructuras terroristas en Hula, Baida y Rab al Talazin, en el sur de Líbano”, ha dicho en un comunicado publicado en su página web.
También se han realizado un ataque con artillería “para eliminar una amenaza en la región de Al Dahira, en el sur de Líbano”, sin que el grupo libanés se haya pronunciado al respecto y sin que por ahora haya informaciones sobre víctimas.
El Ejército israelí y Hezbolá –respaldado por Irán y que cuenta con un importante peso político en Líbano– mantienen una serie de enfrentamientos desde el 8 de octubre, un día después de los ataques perpetrados contra territorio israelí por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y otras facciones palestinas, que dejaron cerca de 1.200 muertos y unos 240 secuestrados.
Las tensiones han ido al alza durante las últimas semanas y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió recientemente de que el Ejército israelí “está preparado para una acción muy poderosa” en la frontera con Líbano, mientras que el propio Ejército asegura tener ya un plan preparado para ello. Por su parte, el ‘número dos’ de Hezbolá, Naim Qassem, sostuvo que una expansión del conflicto derivaría en “devastación y destrucción” en Israel.